Malala somos todos en
la medida en que luchamos ayer y hoy por la educación, por el saber, por el
calcular numéricamente, por el pensar, por el saberse expresar y comunicarse. por el saber hacer y por el saber estar, por dialogar y por convivir en paz.
Malala puede que seamos
multitud pero aquella bala de un Colt 45 que entró por la parte posterior del
ojo izquierdo de Malala y que salió por debajo de su hombro derecho era una
bala de mano criminal aunque temblorosa. Por eso el segundo y el tercer
disparo, cuando Malala se desplomó, dieron con las niñas que iban a su lado en
la camioneta de la Escuela, sí de la Escuela en mayúscula, de la Escuela de esa
multitud que quiere anteponer el Corazón, la Educación, la Sabiduría y la Razón
a la fuerza bruta, la violencia, el dogmatismo y la guerra de un mundo sin corazón.
Malala dice que su país
nació a media noche. Nosotros también decimos que a media noche nació una nueva
luz para una Humanidad Nueva… Y, sin embargo,… ¡Qué lejos estamos del camino de
la luz y del amor! Nació un niño hace siglos. Ahora ha nacido una niña y una renovada andadura.
Recuerdo mis tempranas
y primeras letras; recuerdo también la Escuela; y, después, el Colegio –como
externo- pues entonces no había Instituto en el Pueblo donde vivía, y no todo el mundo podía estudiar. Para el
examen de la reválida de cuarto curso había que ir a Alcoy, desde Onteniente.
De la Provincia de Valencia íbamos a la Provincia de Alicante. Pero yo quería
saber, quería estudiar, quería pensar, quería calcular y hasta soñar, a pesar
de no pocas limitaciones y estrecheces. Por eso digo que Malala somos todos, y
que los que se oponen a ese esfuerzo titánico de la Educación son minoría, pero
son y están ahí, también en nuestras calles, también en nuestros cenáculos
dogmáticos, también entre “crisopatriotas” que no desean a gente
profesionalmente formada y preparada sino a “listos” que les hagan el trabajo
sucio del dinero fácil.
Malala, en Navidad,
somos todos. Pues todos somos seres humanos, hermanos y hermanas de la
Comunidad Mundial. Pero, entonces, ... ¿Por qué tantas diferencias y desigualdades económicas, sociales, políticas, legales, religiosas, étnicas y culturales? Pues porque la construcción de la Comunidad Humana es una tarea que sólo ha comenzado hace muy poco tiempo y, además, tiene detractores muy poderosos.
Nos hace falta el impulso efectivo de la UNESCO y de Naciones Unidas. Miremos lo que dice Mayor Zaragoza que conoce el tema:
ResponderEliminar"Las Naciones Unidas -¡qué faltan nos hacen a pesar de sus deficiencias cuando son los grupos plutocráticos los que llevan el mundo a la hecatombe!- preconizan, desde 1974, que los países más prósperos contribuyan con el 0.7% de su PIB a la ayuda al desarrollo. La Unión Europea, gracias a los países nórdicos y al Reino Unido, alcanza el 0.41% y España, ¡a la cola!, el 0.16%. ¡El “recorte” aplicado en relación a lo que se invertía en el año 2008, cuando éramos uno de los mayores donantes de Europa, es del 70%! Pagamos a los ricos. No a los pobres. Francia, por ejemplo, se mantiene en un 0.42%, por encima de Alemania, como el quinto mayor donante del mundo. "
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