Mañana, día seis de marzo, se presente la Cátedra Ignacio Ellacuría en la Universidad Loyola de Sevilla. Ante este hecho, que me parece importante para el análisis social y político desde diversas perspectivas, viene a la memoria aquel escrito que él tituló "Solución en el Norte..." y un gran problema en el Sur. ¿Por qué? Pues porque la solución de las vallas de Marruecos y de España en Ceuta y Melilla no resuelven en absoluto el gran problema del Sur.
Ignacio, en 1989, a pocos meses de que lo asesinaran junto con su equipo, en la Universidad de la UCA de San Salvador, se refería a que América Latina sólo tenía problemas y que, sin embargo, Estados Unidos tenía una solución. Pero entendía que como esa solución no era una solución para todo el mundo, y ni siquiera para el denominado Tercer Mundo, entonces no podía considerarse como solución humana.
En realidad, nosotros, y todo el Tercer Mundo, lo que tenemos es un gran problema: nos obligan a crucificar a hijos e hijas de los pueblos negro-africanos o a dejarlos como a un "Cristo". La Civilización del Capital no admite la entrada de personas que buscan trabajo y que quieren vivir con dignidad porque no logran realizarse en su tierra de origen -históricamente expoliada y enajenada por ricos y poderosos extraños y ajenos o propios y hasta hermanos-. Esa Civilización de la Riqueza es la que ha hecho de las 4/5 partes de la Humanidad un "Cristo".
¿Qué hacer para lograr una Civilización del Desarrollo de la Humanidad?
En cualquier orden económico o político en el que predomine la seguridad de unos pocos y del capital sobre la dinámica del Desarrollo Humano Solidario, y del trabajo como realización de la persona, lo que se configura es una realidad estructuralmente injusta. Para alguien que reconociera tener una estructura moral como animal humano, eso es un pecado social éticamente muy grave.
Es claro que la violencia engendra violencia. Y yo, al igual que Ellacuría, he mantenido siempre que toda violencia es perversa y nefasta. Pero, como él, también sostengo que hay unas violencias perores que otras y que la raíz de toda violencia está precisamente en la violencia estructural. Mantener a las personas en situaciones inhumanas es violencia estructural.
Valla de Melilla entre la ciudad española y Marruecos.
Evolucionar de forma responsable podría ser la mejor de las revoluciones posibles. Pero, para ello, hay que combatir las violencias estructurales en origen, de raíz. ¿Podrán las Universidades levantar su voz y comprometerse con el Desarrollo Humano?
¿Cuál es el Derecho apropiado para resolver los problemas del Sur? De momento, la garantía de los Derechos Humanos y los Derechos Fundamentales que no deben sufrir limitación legal ni política. Y de inmediato la promoción efectiva del Desarrollo Humano Solidario en todo el Mundo.
Si la Ciencia, si la Técnica, si la Economía, si el Derecho y la Política no prestan servicio al conjunto de la Comunidad Humana; si las soluciones del Norte y de los Poderosos -internos o externos- no son universalizables, estaremos ante desarrollos y soluciones estructuralmente injustas y, a veces, hasta estructuralmente violentos y potencialmente bélicos. ¿Es eso la solución del Norte?
Pepe: Es complicado. Es cuestión de Estado..., aunque, ¿Cómo negar el derecho a circular si lo tienen las mercancías?
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