jueves, 5 de enero de 2012

MISTERIOS DE LA VIDA. A MI NIETO EMI-DANI

¿Cómo nacistes? ¿Quién mejor que tu madre para contarnos cómo fue todo? Lo que sintió al enamorarse, lo que decidió arriesgando, lo que vivió con tu padre en la clásica y decadente Roma, en la Sevilla del Mare Nostrum abierto al Atlántico entre dos grandes columnas, y en Berlín, la ciudad continental que fue capaz de caer el muro vergonzante que separaba el Este Europeo de Occidente. La vida misma es un misterio de la naturaleza. Sobrevivir tiene sus complejidades.
Dice Eduardo Punset, en su visión optimista, que para sobrevivir hemos tenido que ser fieles a nosotros mismos, a nuestras familias, a nuestras tribus, a nuestra cultura, a nuestra especie y a nuestro planeta. De ahí la complejidad de nuestra psicología humana.
Previamente, hemos tenido que sobrevivir llana y simplemente, hemos tenido que sobrevivir físicamente. La madre sabe de esa experiencia extrema entre la muerte y la vida, que se actualiza en los dolores de parto, al natural. Pero también tú, mi querido nieto, superaste duras realidades de la existencia en urgencias que mejor olvidar. Por eso tu tío cuando tiempo ha le preguntaba cómo es la vida repondía sin dudar: "la vida es dura". ¡Qué sabio tu tío!
Sin embargo ahí estáis dando sentido a nuestra vida de mayores, que ya peregrinamos hacia otros lares. Tú está ahí, repleto de vitalidad hasta que te vence el cansancio y el sueño; ahí estás, feliz, yendo a la Kita (la Guardería), cocinando allí o en casa, canturreando, midiéndote con los demás, jugando, bebiendo, comiendo, aplaudiendo, tocando la guitarra, situando a los animales en el Mapa Mundi y pedaleando con tus pies patinetes en el suelo moviendo la bici que circula contigo por las aceras del vecindario, que observa tu presencia de vida.
Recordemos de nuevo lo que indicara Einstein: La vida es como montar en bicicleta, pues para mantener el equilibrio tienes que estar movéndote. Incluso dormidos nos movemos, y hasta soñamos, también frente a países en crisis, que vivieron por encima de sus posibilidades y que envejecieron. Pues, en la vida, a pesar de tantas dificultades, no nos abandona ni el optimismo ni la esperanza. En la vida hay que ser realista. La vida es dura. Pero a la noche, aunque se nos eche encima de forma tempranera, le siguen los amaneceres.
¡Un abrazo!

3 comentarios:

  1. ¡Qué sabio el tío! El tío de Emi, y el mío.

    Un beso.

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  2. Buen año Rafa y buen humor para afrontar la que está cayendo. Salut!

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  3. ¡Salut! Prost! "Chin chin", Brindemos por la vida. ¡Cuántas vivencias!

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