miércoles, 1 de octubre de 2025

DECÁLOGO Y FRATERNIDAD


 

Si Dios es Amor, el Bien que trasciende a toda la Humanidad, y el “Todo Misericordia”, ¿cómo entender este caminar errático y malvado de los pasos actuales carentes de fraternidad y de solidaridad internacional?

         Ya en el Éxodo (ver Decálogo, cap. 20) se nos dice lo que libremente transmito como contenidos preceptivos:

1)   No tendrás dioses rivales.

2)   No pronunciarás el nombre de Dios en falso.

3)   Trabaja y haz tus tareas durante seis días y el séptimo descansa, por dedicado a Dios.

4)   Honra a tu padre y a tu madre.

5)   No matarás.

6)   No cometerás adulterio.

7)   No robarás.

8)   No darás testimonio falso contra tu prójimo ni mentirás.

9)   No codiciarás bienes ajenos. Y  (completando lo que se quiere un Decálogo)

10) No consentirás pensamientos ni deseos injustos contrarios a la Sabiduría.

Nota: Ver el Decálogo que se transmite también en el Deuteronomio de la Biblia, en el cap. 5.


    De la lectura de la Biblia, incluyendo el Nuevo Testamento, del Talmud y del Corán puede deducirse que no hay fe verdadera sin obras efectivas de Amor.

     Enderezar el futuro de la Humanidad pasa, pues, por comprender bien las enseñanzas recibidas que pueden sintetizarse en amar lo Divino y amar al prójimo como a sí mismo.

    CONCLUSIÓN: 

    No a la “egolatría”, no a la carrera de armamentos ni a las guerras por doquier y un Sí mayúsculo a la Solidaridad Internacional y a la Fraternidad.

7 comentarios:

  1. Rafael Mora Galiana2 de octubre de 2025, 2:12

    Nada que alegar a los principios que se tendrían que tener presentes para cumplirlos en todas las actuaciones, incluidas en el seno de las mismas religiones que no se respetan unas a otras, han sido motivo de guerras, apoyos a dudosos poderes o silencios ante las barbaridades actuales de los poderosos. Mentiras, bulos, afán de poder, capitalismo ciego, genocidios, destrozos de los bienes ajenos, insultos, etc son los principios que rigen el mundo actual amte el silencio por intereses de estados e iglesias.

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  2. Aurelio Guerra García2 de octubre de 2025, 7:34

    Nada que añadir a tu acertada reflexión, u icamente,decir que algo más podríamos hacer,individual y colectivamente y no mirar hacia otro lado, ante las actuales atrocidades que estamos viviendo. La historia se repite una vez más desgraciadamente. Un abrazo fraternal amigo Pepe

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  3. Muchas gracias! "Principio Esperanza

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  4. Muchas gracias, Pepe. Magnífica reflexión.
    Como se afirma en la Primera Carta de Juan (4:7-8): “El Amor es Dios; y todo aquél que ama conoce a Dios. El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es Amor”.
    Y san Juan de la Cruz, en su poema Qué bien sé yo la fonte que mana y corre, señala: “Su origen no lo sé, pues no le tiene, mas sé que todo origen de ella tiene”.
    Uniendo ambas enseñanzas, todo lo originado -el cosmos, la existencia…- está constituido desde el Amor, impregnado de Amor y por el Amor guiado. San Agustín lo plasmó en lo que llamó el Ordo Amores (Orden del Amor), que está íntima relación con el Tao oriental, cual principio primordial que lo todo lo impulsa, otorgando a la vida un sentido o destino: el Sentido de la Vida.
    Y los seres humanos estamos dotados de libre albedrío para vivir alineados y en sintonía con ese Sentido o a contramano del mismo. Como se subraya en el tramo final de la República de Platón: “Almas pasajeras, vais a empezar una nueva carrera y a renacer a la condición mortal […] Con respecto a la virtud, no tiene dueño: cada uno tendrá más o menos, según la honre o la menosprecie. Cada uno es responsable de su elección, porque Dios es inocente”.
    La egolatría, la carrera de armamentos, las guerras por doquier y un amplísimo etcétera son creación de la mano humana alejada de la virtud y el Sentido de la Vida (etimológicamente, “pecado” significa precisamente “alejamiento).
    La solidaridad, la fraternidad y, en general, la Reverencia por la Vida -en expresión de Albert Schweitzer, Premio Nobel de la Paz en 1952- son frutos del alineamiento con la Virtud y el Sentido de la Vida.
    Abrazos

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  5. José Mora Galiana3 de octubre de 2025, 1:14

    Gracias, Emilio. Muy buena aportación la tuya

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  6. Querido Pepe, me gusta mucho este texto como posicionamiento cristiano y humanista ante las injusticias sociales del mundo y frente a una mirada etnocéntrica-religiosa. Leo cosas de amigos cristianos, algunos teólogos incluso, que frente al genocidio en Palestina, quieren recordar las persecuciones que sufren los cristianos en otros países del mundo, casos en los que no solo se utilizan datos e imágenes falsas, sino que, en el fondo, tratan de relativizar de este modo lo que sucede en Gaza (como si por ser mayoritariamente musulmanes nos tuviera que importar menos) y tratan de destacar esos casos que digo. Sin quitarle importancia a estos últimos, me parece una interpretación nefasta, no solo porque las razones de esos conflictos no suelen ser estrictamente o exclusivamente religiosas, sino porque no me gusta que, como cristiano, me defiendan frente a otros que no lo son (como si el cristianismo fuese un club especial). Creo que hay que mirar especialmente por los pueblos oprimidos y pobres (empobrecidos), y hacia ellos, más allá de los credos, toda la Fraternidad y la Solidaridad. Un fuerte abrazo

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  7. ¡Amén, querido Pepe!
    Me encanta la simplicidad a la que reduces toda esta barbarie y sentido irracional del discurso religioso/político de los hombres de hoy.
    Me surgen algunas preguntas: ¿Han leído alguna vez unos y otros las Sagradas Escrituras propias? ¿Qué sentido salvífico y humano le darán? ¿Son tan fanáticos por fe o por ignorancia religiosa?
    Sea como fuere, estamos hartos de discursos mesiánicos y necesitados de hombres y mujeres de paz y concordia.
    Y, por encima de todo, es necesario desacralizar el poder del dinero, ese Dios a quien todos están sirviendo y el motor de los acontecimientos humanos actuales...
    ¡Abrazos!

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