lunes, 3 de junio de 2013

EL MITO DE LA UNIÓN EUROPEA

     El mito, al decir de entendidos, es un sistema complejo y dinámico de símbolos, que goza de la virtualidad de que a un mismo significado, o concepto motivado e intencional, puedan asociársele infinidad de significantes. Esto hace del mito una fuente inagotable y dinámica en el devenir de la historia. ¿Es la Unión Europea un Mito? ¿Tiene fundamento real y solidez en su proyección, deseos e ilusiones? ¿Es un proyecto frustrado? De aquí a 2014, centenario de la Iª Guerra Mundial, parece que urge aclarar el tema.

      Dice mi hija Inés - siguiendo al profesor Mario Riorda- que un Mito de Gobierno es:

1- Un proyecto general de Gobierno, ya que la inexistencia de éste es causa de inestabilidad institucional.

2- Un relato breve sostenido en valores y con sobrecarga ideológica, pues los colectivos se apropian de los valores y motivaciones inmersos en el relato y hacen de ello sus creencias. 

3- Una referencia a la memoria colectiva y una reelaboración de ésta, que ayuda a comprender el presente y a proyectarse hacia el futuro. 

     Dice, además, que, una vez que el Mito de Gobierno cala y se expande, para lo que requiere necesariamente de un tiempo dilatado, el mito se deforma, se amplifica y puede vivir de forma independiente. De manera que la apropiación de la ciudadanía es esencial para la pervivencia del mito, y para desde ahí construir consenso, que garantiza la legitimidad y dota de estabilidad, aspirando a conseguir entonces escenarios de gubernabilidad a largo plazo.

     ¿Existe un Mito de Gobierno en la Unión Europea? Me parece que no. Existió un sueño de Gorbachow: La Unión Europea de Los Urales al Atlántico. Existe un "Proyecto de Tratado por el que se instituye una Constitución para Europa". Existen los símbolos: La bandera (doce estrellas doradas sobre fondo azul), el Himno a la Alegría (de la Novena Sinfonía de Beethoven); y la moneda: el euro. Pero... existen, en realidad, normas, políticas -sobre todo económicas- proyectos de cohesión y no pocas medidas restrictivas que alejan a los ciudadanos de asumir, respaldar o legitimar la pretensión Europa.

     Dice Solana (en "Un nuevo ciclo europeo" -el 29 de mayo de 2013, en El País-), veinte días después del día de Europa, que hoy la crisis no sólo es económica, sino política e institucional: "Europa necesita liderazgo político para cambiar la situación económica y romper el círculo vicioso de recesión, paro y austeridad".

     Europa, la realidad social europea, necesita de un Mito de Gobierno capaz de ilusionar y de poner el foco en el empleo, la dignidad humana, el desarrollo pleno y la innovación institucional. Sin ese impulso desiderativo, ¿cómo cantar el Himno a la Alegría?

    Pienso como Solana que las soluciones pasan por Europa, y por su eje Paris-Berlín, y por España en su sitio (como ya advirtiera en tiempo Fernando Morán), sin fantasmas imperiales atlánticos a la vieja usanza o al modo del Mito de Gobierno del ex-Presidente Aznar, que nos embarcó en la Economía de la Guerra y en la Burbuja Inmobiliaria anhelando la España Hegemónica, pero también sin escisiones separatistas que resquebrajan la unidad ante las dificultades y ponen en jaque a las Fuerzas Armadas, a las Fuerzas políticas y a las Fuerzas Económicas y Sociales. Pues esas derivas son un tanto fantasmagóricas.

    Ahora bien, si se permite que sean los tecnócratas prágmaticos neoliberales y neoconservadores los que nos gobiernen de hecho, entonces a medio y largo plazo, peligra la Unión Europea y peligra la Democracia Real (de realidad, no de realeza o soberanía otorgada).  

     Para la justa celebración del 2014, tenemos que vislumbrar que la Unión Europea es uno de los grandes hitos de la Humanidad, por contraposición a la Europa de las Guerras. Es, pues, la hora de recuperar la política como acción transformadora e ilusionar con el trabajo y el desarrollo integral solidario a toda la comunidad de la unión Europea.

    ¿Que nos falta?: liderazgo político esperanzador, mito de gobierno, ilusión, planificación y democracia real, en las políticas públicas de cohesión social, territorial y económica de la Unión Europea.

    

12 comentarios:


  1. ¿Acaso lo que se pretende desde la TROIKA (Comisión, BCE y FMI) no es simplemente una Unión Bancaria? ¿Qué le importa la UE o la Europa Social?

    ResponderEliminar
  2. Para recuperar ilusión se necesita crecer, para crecer y generar empleo se necesita invertir en sectores sostenibles, previa la investigación. Ejemplo energías renovables: agua, aire, sol...

    ResponderEliminar
  3. Pero, los políticos más sobresalientes, expresidentes y exministros, ¿dónde están realmente? ¿Acaso no están al servicio de la Economía Mercantil? Ejemplo: Las Electricas...

    Tampoco ellos pueden liderar una Europa Solidaria y de futuro. Son esclavos de sus altas retribuciones.

    EM

    ResponderEliminar

  4. En vez de pasar todo el tiempo hablando de forma machacona de Informes, déficits, pago de deudas, restricciones, bajadas de pensiones, recortes, y primas de riesgo, Europa debería cambiar el "chip" por la vía de un crecimiento razonable, generando empleo, fortaleciendo la sociedad civil, liderando, además,más allá de la solidaridad regional,una política abierta e internacional basada en el multilateralismo democrñatico eficiente y efectivo, para lograr unas Naciones Unidas con respaldo económico, político y social, que tome en sus manos las riendas de la Comunidad Humana y que implante la Justicia Internacional frente a la Economía de la Guerra y la corrupción sistémica.

    ResponderEliminar
  5. De ilusión también se vive, dice el refranero español


    ResponderEliminar
  6. Pepe: Mira lo que dice José Ignacio Torreblanca, en su análisis: "La nota dominante... parece ser el descreimiento y la ausencia de expectativas sobre la capacidad de la UE a reaccionar".

    ¿No es Europa la que ha abandonado el proyecto de integración territorial, social, política y económica? Sin mantener vivo ese proyecto ¿cómo proyectar una dimensión internacional más ambiciosa?

    PG

    ResponderEliminar

  7. Mira, mira, mira lo que está pasando en Grecia

    Carlos

    ResponderEliminar
  8. Los mitos no se han construido por alguien interesado. Los mitos no son realidad. Europa, la UE, no puede vivir de ilusiones para su cohesión. El Tratado de la Unión, con más de 400 artículos, es un monstruo. Si ese Leviatán lo conviertern en mito para el progreso de la Unión, la UE puede tener los dias contados.

    ResponderEliminar

  9. Jo, Pepe, está genial ló de Desarrollo Libertador. Cómo afinas!!! Y la Inés se parece a su padre, já, já, já cómo afina la puñetera! Parece que el pueblo funciona mejor cuando existe o se cria con “fundamento in re” un mito, eso pasa hasta en el futbol, já, já, já. Si falta el “fundamento in re” el mito se va al carajo más tarde o más temprano, no te parece?

    Un grande abrazo. Enrique

    ResponderEliminar
  10. Un mito es casi un 'todo' esperanzador, que interpreta el presente y se proyecta hacia futuro. Y, evidentemente ha de ser respaldado, corroborado, sostenido ppor las políticas públicas, prácticas concretas. Pero, en mi opinión, ni sin lo uno, ni sin lo otro puede haber proyección a largo plazo.

    Por cierto, aquellas apreciaciones que se me atribuyen en el texto, han sido tomadas de las reflexionnes del profesor Mario Riorda,, de casi obligada consulta en los tiempos que corren en la UE.

    Inés Mora

    ResponderEliminar

  11. Inés: muchas gracias por tus observaciones siempre agudas y certeras o precisas. He modificado la referencia a tu aportación indicando que, en ellas, sigues al profesor Mario Riorda. Y...., ¡Enhorabuena!...

    ResponderEliminar
  12. Benito A. de la Morena15 de junio de 2013, 14:29

    Si no hablo el mismo idioma que mi pareja, difícilmente podré seguir entendiéndome con ella cuando finalice la atracción "hormonal". Si mis costumbres y hábitos son muy diferentes a los de mi pareja, difícilmente podremos seguir juntos cuando tengamos los primeros intereses contrapuestos. Si ella es rica y yo soy pobre, difícilmente podremos seguir compartiendo nuestro futuro y me llamará vago.
    Ese escenario es el la vieja Europa, algo que no se da en EEUU, o China. Quizás el mito de la UE tenga un final parecido al de la antigua URSS, que acabará desmembrándose porque sus conciudadanos tenían intereses muy contrapuestos y diferencias excesivamente significativas, entre otras causas.
    ¿Podemos comparar la forma de afrontar una crisis en España, Grecia o Portugal con el estilo Sueco o Alemán? Yo creo que no, por eso el problema no es falta de liderazgo, mas bien de estilo de ver la cosas, comportamientos de vida y optimización del esfuerzo, eso sin hablar de la honradez.
    Gracias Pepe por dejarme opinar. Un abrazo

    ResponderEliminar