lunes, 1 de noviembre de 2010

TOSANTOS EN LA SIERRA DE ARACENA

TOSANTOS (¿de origen celta?) es una expresión que hace referencia ahora a la festividad tradicional católica de "Todos los Santos", y que se celebra el 1 de noviembre. En su significado religioso vincula a la comunión con todas las personas buenas. Libremente podríamos incluir a Miguel Hernández, el poeta del pueblo; al político y filósofo Gandhi; al defensor de los derechos civiles de los negros, Martin Luther King; o a nuestros padres y abuelos; a Galileo Galilei y a Miguel Servet -prohombres del Renacimiento-; a la abuela, a la tía abuela (tan bondadosa ella) o a la abuela de los niños del pueblo, la singular Florencia, que compartía lo poquísimo que ella tenía; y a tantas y tantas personas anónimas, acogedoras y bondadosas...
Tosantos se vincula también a las primicias de muchos frutos del campo, considerados como dones o regalos (los higos, las nueces, y las castañas; los membrillos y las granadas); y dice relación con el vinito propio (sin colorantes ni conservantes) para acompañar, junto a la candela, el tostón de castañas y la "conversa" de la charla hogareña entre mayores y jóvenes, madres e hijos e hijas.
En relación con la naturaleza y sus bienes, decir que también era tradición (y lo sigue siendo en algunas casas serranas) la denominada "membrillá". Ese membrillo casero es uno de los mejores regalos que podemos ofrecer a los "jóvenes erasmus" de ahora que andan por Europa como perro por su casa. Membrillos Tosantos suena a marca comercial de un fruto casero y artesanal de primera calidad, capaz de competir con las calabazas del "Jalogüin".
Se me ocurre pensar que más interesante que imitar la fiesta "Jalogüin", un tanto tétrica, que sin duda divierte a los niños y niñas de nuestro tiempo, pero que de nuevo, sobre todo en la ciudad, pasa a ser fiesta consumista y de grandes (y también pequeños) almacenes, deberíamos imitar el sentido comercial que por ejemplo tienen los holandeses con sus quesos y sus zuecos, en sus bellos parajes y parques naturales, de aquellos Paises Bajos a los que también estuvo vinculada Hispania.
Efectivamente, sería muy interesante promover la transformación de los productos naturales como las castañas y las nueces; y los membrillos y demás frutas del Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, para comercializarlos como se hace con los jamones de pata negra, no siempre "ibéricos" al 100% (ni mucho menos) de un tiempo a esta parte.
La opción transformadora, la opción de calidad, y el fomento por parte de Autoridades Provinciales o Locales y por parte de la Dirección del Parque Natural de visitas programadas para ver las carpinterías autóctonas, los mataderos, las fábricas de corcho, los manantiales... (incluida la hermosa alberca de Cañaveral, transformada en piscina pública) y la elaboración de esos ricos productos caseros que llegaran a industrializarse, sería más productivo que la simple labor de policia que hoy se ejerce sobre los lugareños, obligados a pedir permiso para cualquier labor tradicional del campo, que ellos saben hacer y hacer bien desde toda la vida.
Tosantos podría volver a ser una gran fiesta donde pudiera valorarse mejor todo lo bueno que nos rodea (personas y naturaleza), lo bueno que tenemos (fruto de la tierra y del trabajo), lo bueno que nos dejaron los antepasados (su saber hacer y su saber estar) y lo bueno que nosotros podemos ofrecer como un presente, como un regalo, como un don, como una mercancía de calidad, y como una posibilidad de desarrollo humano, que genere ocupación, trabajo y renta.
Tosantos se presenta, así, como una invitación a que todos seamos personas, tengamos iniciativa, nos transformemos y transformemos la realidad para que los bienes de la Naturaleza satisfagan las necesidades básicas y nos ayuden en la propia realización como miembros de una sociedad o de una familia y de una comunidad. El regalo de los frutos secos y los membrillos no es sino un signo, un símbolo, un don, en el día de "tosantos" - que Santa Ana La Real celebra compartiendo migas y tostón de castañas en la plaza del pueblo, plaza de la Iglesia y plaza del Ayuntamiento, es decir, plaza de todos -.

6 comentarios:

  1. Yo diría que entre los dones de "tosantos" tambien hay un pregón festivo con la aparición de las setas tras los 22 días posteriores a las lluvias: tanas, tentullos, gallipiernos..., van poniéndose de pie para anunciar con sus dones de la tierra el gran día de "tosantos".

    Una serrana

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  2. Me llama la atencion tu dinamismo narrativo. Sin venir mucho a cuento con tosantos, ni con el membrillo, lejos de tradiciones y sierra: muchas gracias por el comentario en Akirfa.

    Iremos haciendo red, papa, porquito a poco. Nos vamos poniendo en marcha.

    Un beso

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  3. Buenas noches D. José,

    Soy Raúl, un alumno de usted.

    Después de haber leído este artículo me he replanteado el sentido de la festividad de Halloween, difuntos, o los santos.

    Yo hasta el momento a ésta fiesta le daba un doble significado:

    - Hacer honor a los muertos, una tradición celta que hoy se ha convertido en una especie de microcarnaval basado en difraces relacionados con el terror: brujas, vampiros, fantasmas... y alguna que otra telaraña para dar un aire más tenebroso.

    - Día en que la Iglesia católica reivindica a los santos. Una perfecta copia de la fiesta de Halloween (como tenga que hacer una lista de todas las copias e imitaciones que la iglesia ha hecho a otras fiestas y tradiciones no acabo).

    Y no compartía ninguna de las dos, aunque de niño me encantaban los disfraces de terror.

    La primera no la comparto porque dada mi visión del mundo hacer reivindicación a los muertos es la mayor pérdida de tiempo posible. Una persona no es más que una combinación de células que agrupadas toman una forma. Cuando la persona fallece las células se descomponen y pasan a incorporarse a otros seres vivos diferentes: somos una pura combinación. ¿Qué sentido tiene gastar el tiempo presente en seres que ya no existen como tal? Hombre quizá sea que es divertido, en cuyo caso ya veo una razón convincente.

    Y es obvio que tampoco comparto el sentido cristiano, pues el sentido celta o pagano es mucho más ancestral. Y la iglesia no sólo le hace la copia sino que además trata de inculcar que el otro es pecado, en fin...

    Pero después de leer este artículo le he visto un significado y un sentido a esta fiesta tan criticada por mí. Con independencia a la actitud consumista y a las connotaciones religiosas, esta fiesta tiene un sentido cultural: existe una gastronomía, unas actividades que ya pocas personas saben hacer... en definitiva unas tradiciones. Existe también un sentido social: puede ser una fiesta en la que las personas tengan la oportunidad de mostrar el lado más noble de su personalidad. Y tiene un sentido familiar: esas reuniones entre mayores y niños, en la casa rural, con las migas y el membrillo alrededor de la lumbre, que tanta nostalgia causa sobretodo a los abuelos.

    Ciertamente todas esas cosas típicas de esta fiesta están en peligro de extinción, como las reuniones familiares: la falta de tiempo, la dependencia de internet, la adicción a los medios de comunicación, hacen imposible esa convivencia familiar. Los membrillos, las migas... esas comidas artesanales que despararecen junto con la idea de que cocinar sea un arte.

    En conclusión: Al margen de las creencias, esta fiesta ayuda a conservar elementos de nuestra cultura e identidad. Conservémosla pues.

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  4. GRACIAS POR TAN BUENAS APORTACIONES Y ESTÍMULOS.

    Educar en el pensamiento comprehensivo y en el diálogo es tan urgente y necesario como el rigor científico y técnico

    Para un mundo más solidario, y de futuro, esa apertura a los demás es clave.

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  5. ¿Para cuándo una reflexión sobre la Iglesia y su poca vergüenza?

    http://rafabatallitas.blogspot.com

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  6. Rafa: He visto en tu página http://rafabatallitas.blogspot.com

    "La pobre Iglesia, de visita"

    El título ya dice mucho de lo que luego apuntas: La Iglesia jerárquica,

    1) en la dialéctica entre la fe tradicional (dogmática) y el mundo moderno (modernidad), nos toma sistemáticamente el pelo, pues los jerarcas actuales se saltan el Concilio Vaticano II y vuelven al sentido tradicional de Cristiandad y de Nacional Catolicismo (en el caso de España);

    2) en la construcción de Europa (y de España como parte de Europa)se incurre en el mismo delito de falsedad y corrupción que la mayoría de los políticos al decir una cosa y hacer otra: defender la justicia (el derecho) para todos, comenzando por los más pobres y desvalidos, y silenciar la usura de los poderosos bancos, la especulación de los más ricos, o la propia riqueza y patrimonio en contraste con las necesidades y derechos de los parados, de las personas inmigrantes, de las minorías, de las familias más necesitadas, y de los excluidos;

    3) en relación con la visión de Dios, choca sobremanera y es blasfemia usar y abusar de lo "totalmente otro" como si se pudiera disponer de un fantástico móvil en el que comunicarse con lo inefable e interpretar lo trascendente a su manera, siempre parcial, limitada y miope. Pues ni siquiera, en el diálogo interreligioso o intercultural se es consecuente con la visión de un Dios Padre (o Padre y Madre) que nos haría a todas las personas iguales, en cuanto que hermanos;

    4) respecto del derecho a la vida, se vuelve la mirada ante tantos y tantos asesinatos y muertes por causa de las guerras y las luchas de intereses, ante las hambrunas, ante la vida que no es vida digna, en una gran parte de la humanidad, y, sin embargo, sin procrear ellos (los eclesiásticos católicos) formalmente, entran sin pedir permiso en la intimidad de las personas que tienen que decidir a veces sobre situaciones difíciles de resolver en conciencia, sobre el uso de los preservativos (tan necesarios para la salud o para la planificación familiar)... a la vez que ocultan sus miserias y sus tendencias persversas fruto, en muchos casos, de la represión educativa que se ha recibido más que de la propia corrupciópn natural.

    Sabes lo que pienso: la sana laicidad, frente a distintos tipos de confesionalismos religiosos o ideológicos, al respetar las distintas dimensiones del animal humano (individual, social, e histórico)y también la apertura a lo trascendente, es un alto grado de cultura necesario para la convivencia intercultural e interreligiosa, en el seno de cualquier civilización.

    Respecto de la Iglesia Católica actual, la corrupción sistemíca, la blasfemia y la arrogancia son sus grandes contradicciones respecto del amor, la verdad y la justicia.

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