jueves, 16 de marzo de 2023

NATURALEZA Y VIDA SENCILLA

    En estos tiempos de sequía, en Sevilla y Huelva, la llamada a participar (el reciente 14 de marzo al crepúsculo) en el grupo de "Vida Sencilla", comenzó por el silencio y el control de la honda respiración. Despúes surgían las preguntas: ¿Qué es para tí una "vida sencilla"? ¿Qué significa amar la Naturaleza como Casa Común? y ¿Cuál es el camino hacia lo espiritual o trascendente?

     Entendemos por vida sencilla un camino de desprendimiento que se va descubriendo desde la propia consciencia y en contacto con la Naturaleza, desde el amor, tanto personalmente como comunitariamente, y también, de forma más familiar, en la vida cotidiana. 

     Sin duda alguna, la capacidad de amar y razonar, e incluso de trascender, ayudan a ser creativos con sentido de lo que se llego a formular como Bien Común o Interés Universal. 

     De hecho, somos Naturaleza -una pequeña parte de la Naturaleza-; somos hijos de la Tierra y del Sol, y por la noche nos alumbran estrellas e incluso la Luna. Sin embargo, por donde caminamos a diario encontramos a diario mucho materialismo pecuniario, real y virtual, que a menudo provoca frustraciones y hasta depresiones, y afecta de forma muy negativa en la juventud. De ahí la pregunta siguiente: ¿Por qué el sentido común es el menos común de los sentidos? Pues porque seguir la razón que mira el Bien Común es contraria el individualismo egoísta. Ni por Ley Natural ni por Leyes Contractuales debería ser así. 

    Antes que el interés particular debería dominar siempre el Bien Común, la Razón que nos es común a toda persona y a toda comunidad.

 Como deseosos de lluvia, una de las participantes propuso la lectura de una parte segunda (la II. 23) de su libro -todavía inedito-: Amar la Naturaleza, Casa Común: Mirar, fotografiar y dialogar, que dice así: Llueve. 

"Por fin la lluvia cae lenta, pacífica. Lluvia que invita a meditar cada tranquilo pensamiento; y, conmigo, también meditan los árboles y los montes perdidos en la lejanía. Meditan los pájaros resguardados en sus nidos... Hay charcos de agua clara en los caminos.. Por fin, traspaso la densa y gris cortina que me conduce a la serenidad de los espacios, para disfrutar del ritmo misterioso y centelleante de la lluvia." 


 ¿Cuál es el reto? Seguir caminando de forma consciente y libre. 

 En definitiva, se trata de vivir el presente en cada momento, ya sea cotidiano o histórico.